9 cosas que te interesa conocer sobre el mindfulness para aumentar la productividad en tu trabajo
La productividad española es de las más bajas de los países desarrollados, a pesar de que se trabajan bastantes más horas que en países de nuestro entorno más productivos como Alemania. Conoce cómo la aplicación del mindfulness en las empresas puede ayudar a mejorar la productividad y reducir el presentismo en la empresa.
Muchos son los factores determinantes de esta baja productividad, pero para empezar a buscar una solución podemos esperar a que se solucionen todos los factores externos que condicionan la baja productividad de nuestro país, o empezar a trabajar en mejorar de adentro hacia afuera, es decir, mejorar como trabajadores, para que mejoren las empresas y así mejorar la productividad a nivel de país.
El mindfulness es una filosofía de vida basada en la meditación budista que, combinada con otras técnicas de relajación, tiene como finalidad lograr la concentración en el momento presente, así como tomar conciencia de la realidad del mundo que nos rodea.
Ser consciente de nuestras pautas y hábitos de comportamiento, prestando atención a los pensamientos, emociones, sensaciones y al ambiente de cada momento, sin entrar en juicios de valor, focalizando la atención en lo que se percibe y en la búsqueda de soluciones a los problemas que puedan surgir, en lugar de preocuparse por problemas cuya resolución no está a nuestro alcance y sus posibles consecuencias, es en lo que se basa el mindfulness.
La aplicación del mindfulness en las empresas puede aumentar la productividad al conseguir múltiples beneficios para los trabajadores y directivos de las organizaciones, entre los cuales podemos encontrar los siguientes:
- Mejora de la atención en el puesto de trabajo al mejorar la capacidad de concentración. El mindfulness se centra en el entrenamiento de la conciencia y la atención plena, para así poder dirigir de forma voluntaria los procesos mentales, regulando las emociones y aumentando la capacidad de concentración. Esta práctica nos ayuda a ser conscientes de que lo que nos provoca malestar o ansiedad no son los eventos sino la forma en que reaccionamos a estos.
- Se reduce el estrés. El yoga, la meditación y el mindfulness reducen los niveles de cortisol, una hormona que se libera en respuesta al estrés. Si bien el cortisol es necesario para regular y movilizar la energía en situaciones estresantes, si aumenta en exceso puede provocar efectos secundarios no deseados. La práctica del mindfulness aporta calma y serenidad, lo que afecta positivamente a nuestra salud física y emocional.
- Mejora el rendimiento y la productividad. Se aprende a focalizar los esfuerzos en el círculo de influencia. Las personas más proactivas y constructivas se centran en mejorar las cosas sobre las que pueden actuar, consiguiendo con su actitud aumentar su círculo de influencia, mientras que las personas que focalizan sus esfuerzos en aquello que no pueden controlar se convierten en reactivas, insatisfechas y poco productivas.
- Mejora la motivación, la satisfacción y el bienestar. Las empresa tienen que conseguir seleccionar, sustituir, desarrollar y retener a los mejores empleados, manteniendo un equipo cualificado y motivado alineado con los objetivos de la organización, algo que difícilmente lograrán si los trabajadores de la empresa no son felices en su trabajo.
- Se aprende a trabajar mejor bajo presión. Se consigue la habilidad de responder de manera apropiada al estrés que genera el trabajo bajo presión, aprendiendo a priorizar tareas.
- Desarrolla la inteligencia emocional ayudando a mejorar la toma de decisiones. Las personas que practican mindfulness tienen una mayor claridad mental y un mayor control emocional que las personas que no lo practican, de manera que consiguen que las cosas no les afecten tanto, al tener un mayor autoconocimiento y autoconciencia.
- Mejora la resiliencia, es decir la capacidad de adaptación a situaciones adversas y la capacidad para recuperarse de estas rápidamente
- Mejora la comunicación interna y el clima laboral. Se aprende a escucharse mejor y a escuchar mejor a los demás, lo que reduce los conflictos interpersonales. Además se mejora la habilidad de comunicar las emociones a otras personas.
- Mejora la gestión de la incertidumbre y la gestión del cambio.
La mayoría de las grandes empresas de EE.UU. han puesto en marcha iniciativas de mindfulness en sus organizaciones, siendo esta una tendencia que cada vez cobra más importancia en las empresas de Europa y España. Teniendo en cuenta la alta demanda por parte de directivos y trabajadores, el CEF.- ha preparado el Curso de Mindfulness en el Trabajo.
José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
Director Administrativo y Financiero