TSJ. La falta de preaviso en el uso del crédito horario sindical avala el descuento por la empresa en concepto de horas de absentismo

Tutela de los derechos de libertad sindical y demás derechos fundamentales. Miembro de comité de empresa y delegado de prevención de riesgos laborales. Uso del crédito horario sin aviso previo. Empresa que procede a efectuar descuentos en nómina en concepto de «horas de absentismo».
El artículo 68 e) del ET incluye entre las garantías de los miembros del comité de empresa, como representantes legales de los trabajadores, a salvo de lo que se disponga en los convenios colectivos, el «disponer de un crédito de horas mensuales retribuidas para el ejercicio de sus funciones de representación». Y el artículo 37.3 del mismo ET, permite al trabajador ausentarse del trabajo con derecho a remuneración, previo aviso y justificación, «para realizar funciones sindicales o de representación del personal en los términos establecidos legal o convencionalmente». A la luz de la normativa expuesta, constituye el crédito horario un derecho instrumental al servicio de la actividad del sindicato y de sus representantes que forma parte inescindible del derecho fundamental a la libertad sindical. Más ello no obsta que se exija un aviso previo y justificación por parte del representante, a tenor de lo dispuesto en el art. 37.3 e) del ET. Aviso que se exige igualmente en la solicitud del permiso por matrimonio (art. 37.3 a) ET), o en la del permiso por nacimiento de hijo o fallecimiento, accidente u hospitalización de parientes (art. 37.3 b) ET), pese a tratarse en todos los casos de derechos reconocidos legalmente, que no pueden ser limitados por el empresario. Ello supone que no está permitido el abandono sin más del puesto de trabajo, amparándose en el uso del crédito horario legalmente reconocido, debiendo mediar por tanto un preaviso y una justificación. El crédito sindical no puede considerarse un derecho absoluto e incondicionado, sino que debe ejercerse conforme a las reglas de la buena fe y de la manera que resulte menos perjudicial para las necesidades organizativas de la empresa, debiendo siempre intentar conciliarse, cuando ello resulte viable, el derecho del trabajador a dicho disfrute con el menor menoscabo posible a las necesidades del servicio, máxime cuando las mismas afectan a los intereses generales. En el caso analizado, no consta previo aviso alguno, mucho menos, justificación por parte del trabajador. Tampoco se trata de una denegación por parte de la empresa, ya que nunca se solicitó por parte del trabajador, sino que, ante esa ausencia de aviso previo y justificación, se descuenta del sueldo una cantidad por tratarse de «ausencias injustificadas». La parte recurrente no combate esa argumentación, solo se centra en valorar la prueba nuevamente e introducir indebidamente consideraciones teóricas no incluidas en los hechos probados, además de señalar que la empresa nunca le pidió previo aviso o justificación, pero lo cierto es que el precepto es claro, es el trabajador quien debe preavisarlo y justificarlo. Sin que ello se entienda como una autorización por parte del empresario, desde luego, pero la comunicación y la justificación no pueden ser eludidas.