Regular a las trabajadores domésticas reduciría la trata de mujeres

Regular a las trabajadores domésticas reduciría la trata de mujeres

La comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género del Parlamento Europeo adoptó un informe el 18 de febrero sobre las trabajadoras domésticas y las cuidadoras en la UE en el que insta a los países de la Unión Europea (UE) a tomar iniciativas para proteger los derechos de estas personas. "Si se configura esta profesión, se podrá limitar el tráfico de mujeres", aseguró Kostadinka Kuneva, eurodiputada griega del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica.

Señora Kuneva, ¿qué contempla el informe recién adoptado, que en abril será sometido a la votación del pleno de la Eurocámara?

Es un informe de propia iniciativa de la comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género del Parlamento Europeo, sobre un sector del que forman parte 2,5 millones de empleadas y trabajadoras en Europa y 52 millones en todo el mundo. Y esta cifra es la oficial. Alrededor del 29,9 por ciento de las trabajadoras domésticas están completamente excluidas de la legislación laboral nacional. El resultado es que, con frecuencia, son discriminadas, maltratadas y obligadas a trabajar en condiciones precarias. La situación es aún peor en el caso de las inmigrantes.

La comisión de Derechos de la Mujer reclama que la Comisión Europea dé pasos para adoptar iniciativas legislativas y no legislativas que regulen la profesión de trabajadoras domésticas y cuidadoras en la UE.

¿Cómo de grave es el problema y por qué es necesario disponer de legislación europea?

El 83 por ciento de los trabajadores domésticos en todo el mundo son mujeres. Y una elevada proporción de las mismas son inmigrantes. Si regulamos esta profesión, podremos reducir la trata de mujeres y los abusos.

¿Tiene alguna relación este informe con su experiencia personal?

Nunca trabaje en hogares en tanto que inmigrante en Grecia, sino en una empresa de limpieza. Nunca he trabajado en casas. Pero tengo familiares y amigas que sí lo han hecho. He conocido a demasiadas mujeres que han vertido acusaciones sobre sus condiciones laborales y, como secretaria del sindicato griego de Limpiadores, he tratado estas cuestiones y la situación en la que viven.

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